martes, 31 de marzo de 2020

MIÉRCOLES DE LA I SEMANA DE PASIÓN


MIÉRCOLES DE LA I SEMANA DE PASIÓN
Estación en san Marcelo

Idea dominante de la misa de esta feria: Dios oye siempre a los que piadosamente le sirven

INTROITO Salmo 17, 48-49
Liberátor meus de géntibus iracúndis: ab insurgéntibus in me exaltábis me: a viro iníquo erípies me, Dómine, (Psalm) Díligam te, Dómine, virtus mea: Dó minus firmaméntum meum, et refúgium meum, et liberátor meus. Liberátor meus de génti bus iracúndis: ab in surgéntibus in me exaltábis me: a viro iníquo erípies me, Dómine. Liberátor meus...

Tú me libraste de la saña de mis enemigos: me ensalzaras sobre los que se levantan contra mí: me libertares del hombre inicuo. (S) Te amo, Señor, fuerza mía; el Señor es mi fortaleza, mi amparo y mi libertador.
Tú me libraste…
COLLECTA
Nostra tibi, Dómine, quæsumus, sint accépta jejúnia: quæ nos et expiándo grátia tua dignos ef­fíciant: et ad remédia perdúcant ætérna. Per Dominum nosturm.
Después de haber santificado este ayuno, ilustra, oh Dios, misericordiosamente los corazones de tus fieles: y pues infundes el afecto de la devoción a lo que oran, atiende benignamente a sus suplicas. Por nuestro Señor…



EPISTOLA Lv 19, 1-2,11-19
In diébus illis: Locútus est Dóminus ad Moysen, dicens: Lóquere ad omnem cœtum filiórum Israël, et dices ad eos: Ego Dóminus Deus vester. Non faciétis furtum. Non mentiémini, nec decípiet unusquisque próximum suum. Non perjurábis in nómine meo, nec póllues nomen Dei tui. Ego Dóminus. Non fácies calúmniam próximo tuo, nec vi ópprimes eum. Non morábitur opus mercenárii tui apud te usque mane. Non maledíces surdo, nec coram cæco pones offendículum: sed timébis Dóminum Deum tuum, quia ego sum Dóminus. Non fácies quod iníquum est, nec injúste judicábis. Non consíderes persónam páuperis, nec, honóres vultum poténtis. Juste júdica próximo tuo. Non eris criminátor, nec susúrro in pópulo. Non stábis contra sánguinem próximi tui. Ego Dóminus. Non óderis fratrem tuum in corde tuo, sed públice árgue eum, ne hábeas super illo peccátum. Non quæras ultiónem, nec memor eris injúrix cívium tuórum. Díliges amícum tuum sicut teípsum. Ego Dóminus. Leges meas custodíte. Ego enim sum Dóminus Deus vester. 

El Señor le dijo a Moisés: «Di a toda la comunidad de los israelitas: Sed santos, porque yo, el Señor, vuestro Dios, soy santo. «No hurtaréis; no mentiréis; no os engañaréis unos a otros. No juraréis en falso por mi nombre: profanarías el nombre de tu Dios. Yo, el Señor. No oprimirás a tu prójimo, ni lo explotarás. El salario del jornalero no pasará lo noche contigo hasta la mañana siguiente. No maldecirás a un mudo, ni pondrás tropiezo a un ciego, sino que temerás a tu Dios. Yo, el Señor. «Siendo juez, no hagas injusticia, ni por favorecer al pobre ni por miramientos hacia el grande: con justicia juzgarás a tu prójimo. No andes difamando entre los tuyos; no demandes contra la vida de tu prójimo. Yo, el Señor. «No odies en tu corazón a tu hermano, pero corrige a tu prójimo, para que no te cargues con un pecado por su causa. No te vengarás ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo. Amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo, el Señor. «Guardad mis preceptos. Yo soy el Señor Dios vuestro.
GRADUAL   Salmo 29, 2-4
Exaltábo te, Dómine, quóniam suscepísti me: nec delectásti inimícos meos super me. Dómine Deus meus, clamávi ad te, et sanásti me: Dómine, abstraxísti ab ínferis ánimam meam, salvásti me a descendéntibus in lacum.

Te glorificare, Señor, por haberte declarado protector mío, no dejando que mis enemigos se gozaran a costa de mí. v/. Oh Señor, Dios mío, yo clame a ti y me diste la salud. Tú sacaste, Señor, a mi alma del infierno: tú me salvaste, para que no cayera con los que descienden al profundo
TRACTO    Salmo 102,10
Domine, non secundum peccata nostra, quae fecimus nos: neque secundum iniquitates nostras retribuas nobis. Domine, ne memineris iniquitatum nostrarum antiquarum, cito anticipent nos misericordiae tuae: quia pauperes facti sumus nimis. (Hic genuflectitur) Adiuva nos, Deus salutaris noster: et propter gloriam nominis tui, Domine, libera nos: et propitius esto peccatis nostris, propter nomen tuum.

Señor, no nos trates según merecen nuestros pecados, ni según nuestras culpas nos castigues. v/. Señor, no te acuerdes de nuestras antiguas maldades: anticípense a favor nuestro cuanto antes tus misericordias; pues nos hallamos reducidos a extrema miseria. (Aquí se arrodilla.) Ayúdanos, oh Dios salvador nuestro: y por la gloria de tu nombre, líbranos, Señor, y perdona nuestros pecados, por amor a tu nombre
EVANGELIO Juan 10,22-38.

In illo témpore: Facta sunt Encænia in Jerosólymis: et hiems erat. Et ambulábat Jesus in templo, in pórticu Salomónis. Circumdedérunt ergo eum Judæi, et dicébant ei: Quoúsque ánimam nostram tollis? Si tu es Christus, dic nobis palam. Respóndit eis Jesus: "Loquor vobis, et non créditis. Opera, quae ego fácio in nómine Patris Mei, haec testimónium pérhibet de Me: sed vos non créditis, quia non estis ex óvibus Meis. Oves mex vocem Meam áudiunt: et ego cognósco eas, et seqúuntur Me; et ego vitam aetérnam do eis: et non peribunt in aetérnum, et non rápiet eis quisquam de manu Mea. Pater Meus quod dedit Mihi, majus ómnibus est: et nemo potest rápere de manu Patris Mei. Ego, et Pater, unum sumus.Sustulérunt ergo lápides Judaei, ut lapidárent eum. Respóndit eis Jesus: "Multa bona ópera osténdi vobis ex Patre Meo, propter quod eórum opus Me lapidátis?"Respondérunt ei Judæi: De bono ópere non lapidámus te, sed de blas phémia: et quia tu, homo cum sis, facis teípsum Deum. Respóndit eis Jesus:"Nonne scriptum est in lege vestra: quia Ego dixi, dii estis? Si illos dixit deos, ad quos sermo Dei factus est, et non potest solvi Scriptúra: quem Pater sanctificávit, et misit in mundum, vos dícitis: Quia blasphémas: quia dixi Fílius Dei sum? Si non fácio ópera Patris mei, nolite crédere Mihi. Si autem fácio, et si mihi non vultis crédere, opéribus crédite, ut cognoscátis, et credátis, quia Pater in me est, et ego in Patre." 
Se celebraba en Jerusalén la fiesta de la Dedicación, fiesta que era en invierno. Y Jesús se paseaba en el templo, por el pórtico de Salomón. Le rodearon, pues, los judíos, y le dijeron: ¿Hasta cuándo has de traer suspensa nuestra alma? Si tú eres el Cristo, dínoslo abiertamente.  Les respondió Jesús : Os lo estoy diciendo, y no lo creéis: las obras que yo hago en nombre de mi Padre, ésas están dando testimonio de mí. Mas vosotros no creéis, porque no sois de mis ovejas. Mis ovejas oyen la voz mía; y yo las conozco, y ellas me siguen. Y yo les doy la vida eterna; y no se perderán jamás, y ninguno las arrebatará de mis manos. Pues lo que mi Padre me ha dado, todo lo sobrepuja; y nadie puede arrebatarlo de mano de mi Padre o de la mía. Mi Padre y yo somos una misma cosa. Al oír esto los judíos, cogieron piedras para apedrearle. Les dijo Jesús : Muchas buenas obras he hecho delante de vosotros por la virtud de mi Padre, ¿por cuál de ellas me apedreáis? Le respondieron los judíos: No te apedreamos por ninguna obra buena, sino por blasfemia; y porque siendo tú un hombre, te haces Dios. Les replicó Jesús : ¿No está escrito en vuestra ley: Yo dije, dioses sois? Pues si llamó dioses a aquellos a quienes habló Dios, y no puede faltar la Escritura,  ¿cómo de mí, a quien ha santificado el Padre, y ha enviado al mundo, decís vosotros que blasfemo, porque he dicho: Soy Hijo de Dios? Si no hago las obras de mi Padre, no me creáis. Pero si las hago, aunque no queráis darme crédito a mí, dádselo a mis obras, a fin de que conozcáis, y creáis que el Padre está en mí, y yo en el Padre.
OFERTORIO     Salmo 58,2
Eripe me de inimícis meis, Deus meus, et ab insurgéntibus in me líbera me, Dómine.


Sálvame, Dios mío, de mis enemigos, líbrame de los que me asaltan, Señor.
SECRETA
Annue, miséricors Deus: ut hóstias placatiónis et laudis, sincéro tibi deferámus obséquio. Per Dominum nostrum.
Concédenos, Dios misericordioso, que te ofrezcamos con sincero corazón estas hostias de propiciación y de alabanza. Por nuestro Señor…
PREFACIO DE LA SANTA CRUZ

Vere dignum et justum est, aequum et salutare, nos tibi semper, et ubique gratias agere: Domine sancte, Pater omnipotens, aeterne Deus. Qui salutem humani generis in ligno crucis constituisti: ut, unde mors oriebatur, inde vita resurgeret: et qui in ligno vincebat, in ligno quoque vinceretur, per Christum Dominum nostrum. Per quem majestatem tuam laudant Angeli, adorant Dominationes, tremunt Potestates. Coeli, coelorumque Virtutes, ac beata Seraphim, socia exsultatione concelebrant. Cum quibus et nostras voces, ut admitti jubeas, deprecamur, supplici confessione dicentes:
En verdad es digno y justo, equitativo y saludable, darte gracias en todo tiempo y lugar, Señor, santo Padre, omnipotente y eterno Dios, que pusiste la salvación del género humano en el árbol de la cruz, para que de donde salió la muerte, saliese la vida, y el que en un árbol venció, en un árbol fuese vencido por Cristo nuestro Señor; por quien alaban los Ángeles a tu majestad, la adoran las dominaciones, la temen las Potestades y la celebran con igual júbilo los Cielos, las Vírgenes de los cielos y los bienaventurados Serafines. Te rogamos, que, con sus voces admitas también las de los que decimos, con humilde confesión
COMUNION    Salmo 25, 6-7
Lavabo inter innocéntes manus meas, et circuíbo altáre tuum, Dómine: ut áudiam vocem laudis tuæ, et enárrem univérsa mirabília tua.

Lavare mis manos en compañía de los inocentes y rodeare, Señor, tu altar, para oír las voces de alabanza y referir todas tus maravillas
POSTCOMUNION
Cæléstis doni benedictiónis percépta: súpplices te, Deus omnípotens, deprecámur; ut hoc idem no bis et sacraménti causa sit, et salútis. Per Dominum nostrum

Habiendo recibido la bendición del don celestial, te suplicamos humildemente, Dios todopoderoso, que este mismo sacramento sea causa de nuestra salvación. Por nuestro Señor…
SOBRE EL PUEBLO
Oremus .Humiliate capita vestra Deo.Adésto supplicatiónibus nostris, omnípotens Deus: et quibus fidúciam speránda' pietátis indúlges: consuétae misericórdiæ tribue benígnus efféctum. Per Dominum nostrum.

Oremos. Humillad ante Dios vuestras cabezas
Atiende, oh Dios todopoderoso, a nuestras suplicas; y pues nos das confianza en tu promesa, concede benigno el efecto de tu acostumbrada misericordia. Por nuestro Señor…


Transcripto por gentileza de Dña. Ana María Galvez