10 de julio
LOS SIETE HERMANOS MÁRTIRES
SANTA RUFINA Y SANTA SEGUNDA
VIRGENES Y MÁRTIRES
III clase, rojo
Gloria y prefacio común
Los
siete hermanos (Jenaro, Félix, Felipe, Silvano, Alejandro, Vidal y Marcial),
cuya fiesta celebramos, son los hijos de Santa Felicitas, ilustre romana del
siglo II. Confesaron la fe valientemente ante la mirada de esta madre admirable
que temía más, dice San Gregorio Magno, dejar a sus hijos vivos después de
ella, que, como suelen temer los padres carnales, verlos morir antes.
Rufina
y Segunda eran hermanas; sus padres las habían prometido a dos señores romanos,
pero rehusaron casarse, porque ya habían elegido como esposo a Jesucristo. Se
las encarceló y se las azotó para que consintiesen en la pérdida de la
virginidad y de la fe. Se las arrojó al Tíber, pero un ángel acudió a sacarlas.
Finalmente, fueron decapitadas por orden de los emperadores Valeriano y Galo,
en el año 257.
INTROITO Salmo 112,
1.9.2
Laudáte,
púeri, Dóminum, laudáte nomen Dómini: qui habitáre facit stérilem in domo,
matrem filiórum lætántem. V/. Sit nomen Dómini benedíctum:
ex hoc nunc, et usque in sǽculum. V/. Glória Patri et Filio et
Spiritui Sancto. Sicut erat in principio
et nunc et semper, et in saecula saeculorum. Amén
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Alabad,
servidores del Señor, alabad el nombre del Señor, que hace morar en casa a la
estéril, madre feliz de numerosos hijos. V/. Bendito sea el nombre del Señor desde
ahora para siempre. V/. Gloria al Padre, y al Hijo y al Espíritu
Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
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COLECTA
Præsta,
quǽsumus, omnípotens Deus: ut, qui gloriósos Mártyres fortes in sua
confessióne cognóvimus, pios apud te in nostra intercessióne sentiámus. Per Dominum Jesum Christum, Filium Tuum, qui
Tecum vivit et regnat in unitate Spiritus Sancti, Deus, per omnia saecula
saeculorum. Amen.
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A
los gloriosos mártires, cuya intrepidez en la confesión de su fe hemos
conocido, sintámoslos también, Dios omnipotente, ardorosos en su intercesión
por nosotros cerca de ti. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que contigo
vive y reina en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los
siglos. Amén.
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EPÍSTOLA Proverbios
31.10-31
Léctio
libri Sapiéntiæ.
Mulíerem
fortem quis invéniet? Procul, et de últimis fínibus prétium ejus. Confídit in ea cor viri sui, et spóliis non
indigébit. Reddet ei bonum, et non malum, ómnibus diébus vitæ suæ. Quæsívit
lanam et linum, et operáta est consíllio mánuum suárum. Facta est
quasi navis institóris, de longe portans panem suum. Et de nocte surréxit,
dedítque prædam domésticis suis. Considerávit agrum, et emit eum: de fructu
mánuum suárum plantávit víneam. Accínxit fortitúdine lumbos suos, et
roborávit bráchium suum. Gustávit, et vidit, quia bona est negotiátio ejus:
non exstinguétur in nocte lucérna ejus. Manum suam misit ad fórtia, et dígiti
ejus apprehendérunt fusum. Manum suam
apéruit inopi, et palmas suas exténdit ad páuperem. Non timébit dómui suæ a
frigóribus nivis: omnes enim doméstici ejus vestíti sunt duplícibus.
Stragulátam vestem fecit sibi: byssus et púrpura induméntum ejus. Nóbilis in
portis vir ejus, quando séderit cum senatóribus terræ. Síndonem fecit, et
véndidit, et cíngulum trádidit Chananǽo. Fortitúdo et decor induméntum ejus,
et ridébit in die novíssimo. Os suum apéruit sapiéntiæ, et lex cleméntiæ in
lingua ejus. Considerávit sémitas domus suæ, et panem otiósa non comédit.
Surrexérunt fíllii ejus, et beatíssimam prædicavérunt: vir ejus, et laudávit
eam. Multæ fíliæ congregavérunt divítas: tu supergréssa es univérsas. Fallax
grátia, et vana est pulchritúdo: múlier timens Dóminum, ipsa laudábitur. Date
ei de fructu mánuum suárum: et laudent eam in portis ópera ejus.
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Lectura
del libro de la Sabiduría.
¿Quién
hallará una mujer fuerte? Su precio es, con mucho, mayor que el de las
perlas. Confie en ella el corazón de su marido, que no le faltarán ganancias.
Ella le acarrea el bienestar y no la desgracia, todos los días de su vida.
Busca lana y lino, y trabaja con la habilidad de sus manos. Es como nave de
comerciante, que trae víveres de lejos. Se levanta cuando aún es de noche y
distribuye la comida a su casa y la tarea a sus criadas. Pone su mira en unas
tierras, y las compra; del fruto de sus manos planta una viña. Ciñe vigorosamente sus lomos y arma de vigor
sus brazos. Comprueba que marcha bien su negocio; no se apaga su lámpara de
noche. Aplica sus manos a la rueca y sus dedos manejan el huso. Abre sus brazos
al desdichado y tiende su mano al indigente. No teme para su casa las nieves,
porque todos traen vestidos forrados. Hácese ella sus cobertores y se viste
de lino y púrpura. Su esposo es respetado a las puertas de la ciudad, cuando
se sienta entre los ancianos del país. Ella teje finas telas y las vende y
proporciona ceñidores al mercader. La fortaleza y la gracia son sus atavíos;
y sonde al porvenir. Abre su boca con prudencia y la buena palabra esta sobre
su lengua. Vigila la marcha de su casa y no come ociosa el pan. Levántanse
sus hijos para aclamarla dichosa; su marido la alaba diciendo: Muchas mujeres
se han mostrado valientes, pero tú aventajas a todas. Engañosa es la gracia y
vana la hermosura; la mujer que teme al Señor, ésa es digna de alabanza.
Dadle del fruto de sus manos, y sean sus obras las que hagan su elogio a las
puertas de la ciudad.
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GRADUAL
Salmo 123, 7-8
Anima
nostra, sicut passer, erépta est de láqueo venántium. v. Láqueus
contrítus est, et nos liberáti sumus: adjutórium nostrum in nómine Dómini,
qui fecit cælum et terram.
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Nuestra
alma escapó, cual pájaro, del lazo de los cazadores. ℣. Se ha roto
el lazo, y nosotros hemos sido liberados; nuestro socorro es el nombre del
Señor, que ha hecho el cielo y la tierra.
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ALELUYA
Allelúja,
allelúja. V/. Hæc est véra
fratérnitas, quæ vicit mundi crímina: Christum secúta est, inclyta tenens
regna cæléstia. Allelúja.
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Aleluya,
aleluya. V/. Ésta es la
verdadera hermandad, que ha triunfado de los pecados del mundo. Ha seguido a
Cristo; posee la gloria del reino celestial. Aleluya.
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EVANGELIO Mateo 12, 46-50
Sequéntia
sancti Evangélii secúndum Lucam.
In illo témpore: Loquénte Jesu ad turbas, ecce mater ejus, et fratres stabant foris, quæréntes loqui ei. Dixit autem ei quidam: «Ecce mater tua, et fratres tui foris stant, quæréntes te.» At ipse respóndens dicénti sibi, ait: «Quæ est mater mea, et qui sunt fratres mei?» Et exténdens manum in discípulos suos dixit: «Ecce mater mea et fratres mei. Quicúmque enim fécerit voluntátem Patris mei, qui in cælis est: ipse meus frater et soror, et mater est.» |
Lectura
del santo Evangelio según san Lucas.
En
aquel tiempo: Hablando Jesús aún a las turbas, su madre y sus hermanos
estaban fuera buscando hablarle. Alguien le dijo: Mira, tu madre y tus
hermanos están fuera y te buscan. Pero él respondió al que le hablaba: ¿Quién
es mi madre y quiénes son mis hermanos? Y extendiendo su mano hacia sus discípulos,
dijo: He aquí a mi madre y a mis hermanos. Porque quien hace la voluntad de
mi Padre que está en los cielos, ése es mi hermano, mi hermana y mi madre.
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OFERTORIO Salmo 123, 7
Anima
nostra, sicut passer, erépta est de láqueo venántium: láqueus contrítus est,
et nos liberáti sumus.
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Nuestra
alma ha escapado como pájaro, del lazo de los cazadores; el lazo se ha roto y
hemos sido liberados.
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SECRETA
Sacrifíciis
præséntibus, quǽsumus, Dómine inténde placátus: et, intercedéntibus Sanctis
tuis, devotióni nostræ profíciant, et salúti. Per
Dominum Jesum Christum, Filium Tuum, qui Tecum vivit et regnat in unitate
Spiritus Sancti, Deus,
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Mira,
Señor, aplacado el presente sacrificio; y por la intercesión de tus santos, haz
que aproveche a nuestra fidelidad y a nuestra salvación. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que
contigo vive y reina en la unidad del Espíritu Santo y es Dios
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PREFACIO
COMÚN
Vere dignum et iustum est, æquum et salutáre, nos
tibi semper et ubíque grátias ágere: Dómine, sancte Pater, omnípotens ætérne
Deus: per Christum Dóminum nostrum. Per quem majestátem tuam laudant Angeli, adórant Dominatiónes, tremunt
Potestátes. Cæli cælorúmque Virtútes, ac beáta Séraphim, sócia exsultatióne
concélebrant. Cum quibus et nostras voces, ut admítti júbeas deprecámur,
súpplici confessióne dicéntes:
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Verdaderamente es digno y justo, equitativo y
saludable que te demos gracias en todo tiempo y lugar ¡Señor Santo, Padre
todopoderoso y eterno Dios! Por cuanto, por el Misterio de la Encarnación del
Verbo ha brillado a los ojos de nuestra alma un nuevo resplandor de tu
gloria: para que al conocer a Dios visiblemente, seamos por Él arrebatados al
amor de las cosas invisibles. Y por eso, con los Ángeles y los Arcángeles,
con los Tronos y las Dominaciones, y con toda la milicia del ejército
celestial, entonamos a tu gloria un himno, diciendo sin cesar:
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COMUNIÓN Mateo 12, 50
«Quicúmque
enim fécerit voluntátem Patris mei, qui in cælis est: ipse meus frater et
soror, et mater est,» dicit Dóminus.
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El
que hace la voluntad de mi Padre, que está en los cielos, ése es mi hermano,
mi hermana y mi madre; lo dice el Señor.
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POSCOMUNIÓN
Deus:
ut intercedéntibus Sanctis tuis, illíus salutáris capiámus efféctum: cujus
per hæc mystéria pignus accépimus. Per
Dominum Jesum Christum, Filium Tuum, qui Tecum vivit et regnat in unitate
Spiritus Sancti, Deus, per omnia saecula saeculorum. Amen.
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Te
suplicamos, Dios omnipotente, que por la intercesión de tus santos nos
hagamos participes de los frutos de aquella salvación, cuya prenda hemos
recibido en estos misterios. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que
contigo vive y reina en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos
de los siglos. Amén.
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Folleto
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