martes, 14 de abril de 2020

MIÉRCOLES DE PASCUA


MIÉRCOLES DE PASCUA
Estación en San Lorenzo Extramuros

La resurrección del Salvador es prenda de nuestra eterna bienaventuranza.

INTROITO    Mateo 25, 34. Sal 95, 1
VENÍTE, benedícti Patris mei, percípite regnum, allelúja: quod vobis parátum est ab orígine mundi, allelúja, allelúja, allelúja. V/. Cantáte Dómino cánticum novum: cantáte Dómino, omnis terra. V/. Glória Patri.
BENDITOS de mi Padre, venid a tomar posesión del reino, aleluya; que os está preparado desde el principio del mundo, aleluya, aleluya. V/. Cantad al Señor un cantico nuevo; ¡oh tierra toda, cantad al Señor!. V/. Gloria al Padre…

COLECTA
DEUS, qui nos Resurrectiónis Domínicae ánnua solemnitáte laetíficas: concéde propítius ; ut per temporália festa quae ágimus, perveníre ad gáudia aetérna mereámur. Per eúmdem Dóminum.
OH DIOS, que nos alegras todos los años con las solemnidades de la resurrección del Señor: concédenos propicio que, por las fiestas temporales que celebramos, merezcamos llegar a los eternos gozos. Por el mismo Señor nuestro…

EPISTOLA Hch 3,13-15.17-19.
LÉCTIO ACTUUM APOSTOLÓRUM.
IN diébus illis: Apériens Petrus os suum, dixit: Viri Israëlítae, et qui timétis Deum, audíte. Deus Abraham, et Deus Isaac, et Deus Jacob, Deus patrum nostrórum, glorificávit Fílium suum Jesum, quem vos quidem tradidístis, et negástis ante fáciem Piláti, judicánte illo dimítti. Vos autem sanctum, et justum negástis, et petístis virum homicídam donári vobis: auctórem vero vitae interfecístis, quem Deus suscitávit a mórtuis, cujus nos testes sumus. Et nunc, fratres, scio quia per ignorántiam fecístis, sicut et príncipes vestri. Deus autem, quae praenuntiávit per os ómnium Prophetárum, pati Christum suum, sic implévit. Paenitémini ígitur, et convertímini, ut deleántur peccáta vestra.
LECTURA DE LOS HECHOS DE LOS APÓSTOLES.
En aquellos días, habló Pedro diciendo: Hombres de Israel, y los que teméis a Dios; escuchad. El Dios de Abrahán, el Dios de Isaac, y el Dios de Jacob, el Dios de nuestros padres ha glorificado con este prodigio a su Hijo Jesús, a quien vosotros habéis entregado y negado en el tribunal de Pilatos, juzgando éste que debía ser puesto en libertad.  Mas vosotros renegasteis del Santo y del Justo, y pedisteis que se os hiciese gracia de la vida de un homicida. Disteis la muerte al autor de la vida, pero Dios le ha resucitado de entre los muertos, y nosotros somos testigos de su resurrección.  Ahora, hermanos, yo bien sé que hicisteis por ignorancia lo que hicisteis, como también vuestros jefes. Si bien Dios ha cumplido de esta suerte lo pronunciado por la boca de todos los profetas, en orden a la pasión de su Cristo.  Haced, pues, penitencia, y convertíos, a fin de que se borren vuestros pecados.

GRADUAL    Salmo 117, 24 y 16
Haec dies, quam fecit Dóminus: exsultémus et laetémur in ea. V/. Déxtera Dómini fecit virtútem, déxtera Dómini exaltávit me.
Este es el día que preparo el Señor; alegrémonos y gocémonos en él. V/. La diestra del Señor ha revelado su fuerza, la diestra del Señor me ensalzo.

ALELUYA Lc 24, 34
Alleluia, alleluia. V/. Surréxit Dóminus vere: et appáruit Petro.
Aleluya, aleluya. V/.Resucito verdaderamente el Señor, y se apareció a Pedro.

SECUENCIA
Victimæ pascháli laudes ímmolent Chrístiani. Agnus redémit oves: Christus ínnocens Patri reconciliávit peccatóres. Mors et vita duéllo conflixére mirándo: dux vitæ mórtus, regnat vivus. Dic nobis, María, quid vidísti in via? Sepúlcrum Christi vivéntis: et glóriam vidi resurgéntis. Angélicos testes, sudárium, et vestes. Suréxit Christus spes mea: præcédet vos in Galilǽam. Scimus Christum surrexíse a mórtuis vere: tu nobis, victor Rex, miserére. Amen. Allelúja.
Ofrezcan los cristianos sacrificios de alabanza a  la Víctima de la Pascua. El Cordero ha redimido a  las ovejas: Cristo inocente, ha reconciliado a los pecadores con el Padre. La muerte y la vida contendieron en duelo asombroso: el dueño de la vida muerto, reina vivo. Dinos, tú ¡oh María! ¿Qué has visto en el camino? Yo he visto el sepulcro de Cristo que vive, y la gloria del que ha resucitado. He visto los angélicos testigos, el sudario y la mortaja. Cristo, mi esperanza, ha resucitado: os precederá a Galilea. Sabemos que Cristo verdaderamente ha resucitado de entre los muertos: oh tú, Rey vencedor, apiádate de nosotros. Amen. Aleluya

EVANGELIO Juan 21, 1-14
SEQUÉNTIA SANCTI EVANGÉLII SECÚNDUM JOÁNNEM.
IN illo témpore: Manifestávit se íterum Jesus discípulis ad mare Tiberíadis. Manifestávit autem sic. Erant simul Simon Petrus, et Thomas, qui dícitur Dídymus, et Nathánaël, qui erat a Cana Galilaéae, et fílii Zebedaéi, et álii ex discípulis ejus duo. Dicit eis Simon Petrus: Vado piscári. Dicunt ei: Venímus et nos tecum. Et exiérunt, et ascendérunt in navim: et illa nocte nihil prendidérunt. Mane autem facto, stetit Jesus in líttore: non tamen cognovérunt discípuli quia Jesus est. Dixit ergo eis Jesus: Púeri, numquid pulmentárium habétis ? Respondérunt ei: Non. Dicit eis: Míttite in déxteram navígii rete, et inveniétis. Misérunt ergo: et jam non valébant illud tráhere prae multitúdine píscium. Dixit ergo discípulus ille, quem diligébat Jesus, Petro: Dóminus est. Simon Petrus cum audísset quia Dóminus est, túnica succínxit se (erat enim nudus), et misit se in mare. Alii autem discípuli navígio venérunt (non enim longe erant a terra, sed quasi cúbitis ducéntis), trahéntes rete píscium. Ut ergo descendérunt in terram, vidérunt prunas pósitas, et piscem superpósitum, et panem. Dicit eis Jesus: Afférte de píscibus, quos prendidístis nunc. Ascéndit Simon Petrus, et traxit rete in terram, plenum magnis píscibus centum quinquagínta tribus. Et cum tanti essent, non est scissum rete. Dicit eis Jesus: Veníte, prandéte. Et nemo audébat discumbéntium interrogáre eum: Tu quis es ? sciéntes, quia Dóminus est. Et venit Jesus, et áccipit panem, et dat eis, et piscem simíliter. Hoc jam tértio manifestátus est Jesus discípulis suis, cum resurrexísset a mórtuis.
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN
Después de esto Jesús se apareció otra vez a los discípulos a la orilla del mar de Tiberíades; y fue de esta manera:  Estaban juntos Simón Pedro, y Tomás, llamado Dídimo, y Natanael, el cual era de Caná de Galilea, y los hijos de Zebedeo, y otros dos de sus discípulos.  Les dijo Simón Pedro: Voy a pescar. Le respondieron ellos: Vamos también nosotros contigo. Fueron, pues, y entraron en la barca, y aquella noche no cogieron nada.  Venida la mañana, se apareció Jesús en la ribera; pero los discípulos no conocieron que fuese él.  Y Jesús les dijo: Muchachos, ¿tenéis algo que comer? Le respondieron: No.  Les dijo él: Echad la red a la derecha del barco; y encontraréis. La echaron, pues; y ya no podían sacarla por la cantidad de peces que había.  Entonces el discípulo aquel que Jesús amaba, dijo a Pedro: Es el Señor. Simón Pedro apenas oyó: Es el Señor, se vistió la túnica (pues estaba desnudo, o en paños menores) y se echó al mar. Los demás discípulos vinieron en la barca, tirando la red llena de peces (pues no estaba lejos de tierra, sino como unos doscientos codos).  Al saltar en tierra, vieron preparadas brasas encendidas, y un pez puesto encima, y pan. Jesús les dijo: Traed acá de los peces que acabáis de coger. Subió al barco Simón Pedro, y sacó a tierra la red, llena de ciento cincuenta y tres peces grandes. Y aunque fueran tantos, no se rompió la red. Les dijo Jesús: Vamos, almorzad. Y ninguno de los que estaban comiendo osaba preguntarle: ¿Quién eres tú?, sabiendo bien que era el Señor.
Se acercó, pues, Jesús, y tomó el pan, y se los distribuyó, y lo mismo hizo del pez.
Esta fue la tercera vez que Jesús apareció a sus discípulos, después que resucitó de entre los muertos.
Se dice Credo.
OFERTORIO    Salmo 77, 23-25
PORTAS CAELI apéruit Dóminus: et pluit illis manna, ut éderent: panem caeli dedit eis: panem Angelórum manducávit homo, allelúja.
ABRIÓ EL SEÑOR las puertas del cielo, e hizo llover maná para nutrirlos; les envió pan de cielo; el hombre comió pan de Ángeles. Aleluya



SECRETA
SACRIFÍCIA, Dómine, paschálibus gáudiis immolámus: quibus Ecclésia tua mirabíliter et páscitur et nutrítur. Per Dóminum.
TE INMOLAMOS, Señor, en las alegrías de Pascua estos sacrificios, con los que tu Iglesia maravillosamente se nutre y alimenta. Por nuestro Señor…

PREFACIO PASCUAL
VERE DIGNUM et iustum est, æquum et salutáre: Te quidem, Dómine, omni tempore, sed in hac potíssimum die gloriósius prædicáre, cum Pascha nostrum immolátus est Christus. Ipse enim verus est Agnus, qui ábstulit peccáta mundi. Qui mortem nostram moriéndo destrúxit, et vitam resurgéndo reparávit. Et ídeo cum Angelis et Archángelis, cum Thronis et Dominatiónibus, cumque omni milítia cæléstis exércitus, hymnum glóriæ tuæ cánimus, sine fine dicéntes:
EN VERDAD es digno y justo, equitativo y saludable, que en todo tiempo, Señor, te alabemos; pero con más gloria que nunca en este día (en este tiempo), en que se ha inmolado Cristo, nuestra Pascua.  El cual es el verdadero Cordero que quita los pecados  del  mundo y que muriendo, destruyo nuestra muerte y, resucitando repa­ró nuestra vida. Por eso con los Ángeles y los Arcángeles, con los Tronos y las Domina­ciones, y con. toda la milicia del ejército celestial, cantamos un himno a tu gloria, diciendo sin cesar:
Comunicantes y Hanc igitur propios, durante toda la octava.

COMUNION   
CHRISTUS resúrgens ex mórtuis, jam non móritur, allelúja: mors illi ultra non dominábitur, allelúja, allelúja.
CRISTO resucitado de entre los muertos, no muero ya, aleluya; la muerte no tendrá ya dominio sobre él, aleluya, aleluya.

POSCOMUNION
AB omni nos, quaésumus, Dómine, vetustáte purgátos: sacraménti tui veneránda percéptio in novam tránsferat creatúram: Qui vivis.
TE SUPLICAMOS, Señor, que libres de lo viejo y caduco, nos transforme en nuevas criaturas la participación veneranda de tu Sacramento; que vives


Transcripto por Dña. Ana María Galvez



Vísperas del Domingo de Pascua y octava